Salmo 103:1-5

Bendice alma mía a YAHWEH.



Que el amor de nuestro Adonay Yahshua Ha Mashiaj sea con todos ustedes.
Saludos


Salmos 103.1-5


“Bendice, alma mía, a YAHWEH, y bendiga todo mi ser su santo nombre. 
2 Bendice, alma mía, a YAHWEH, y no olvides ninguno de sus beneficios.
3 El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias; 4 El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias; 5 El que sacia de bien tu boca de modo que te rejuvenezcas como el águila”.


Estos cinco versículos del salmo 103 los tengo en el escritorio de mi computadora, cada vez que enciendo el monitor los observo, reflexiono en ellos y procuro mantenerlos presente en mi corazón.


El rey David le habla a su propio entendimiento, impulsándolo a engrandecer, exaltar, glorificar, honrar al Creador de los cielos y la tierra; no sólo al entendimiento, sino también a toda su existencia, cuerpo y mente en armonía; así mismo, se invita a hacer memoria de los bienes que Di-s le otorgó, enumerándolos en un orden lógico, empezando por el más importante de todos:el perdón de pecados. 
Todo aquel que siente un arrepentimiento genuino y clama a Di-s por medio de su hijo YAHSHUA obtendrá el beneficio del perdón, trayendo consigo el favor número dos; la sanidad, la salud del corazón, quitando los sufrimientos ocasionados por el error (leer Lucas 4-14 -20); lo cual nos depara el bien número tres: rescate del hoyo de la corrupción, destrucción o sepulcro, dando vida eterna a todo aquel que cree en YAHSHUA como Señor Salvador, coronando la dádiva número cuatro: amor, consuelo , gracia, consejo y misericordia Lamentaciones 3.22 “Por la misericordia de YAHWEH no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. 23 Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad”.


La boca habla lo que hay en el corazón, hay bocas llenas de maledicencias, amarguras, ira, mentira, engaños, tristeza, envidias, odio, orgullo, maldad, temor, resentimiento, que envejecen a nuestra alma, que producen muerte; pero cuando Di-s nos perdona, sana, rescata y corona de bienes nuestra vida, mudando el corazón en agradecimiento gozo, paz, mansedumbre, verdad, amor; ésto sale por la boca provocando vida, un rejuvenecimiento a toda nuestra existencia como el águila.


“Bendice, alma mía, a YAHWEH, y bendiga todo mi ser su santo nombre y no olvides ninguno de sus beneficios” 
Shalom.

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